Carta a los correlligionarios

Queridas amigas y amigos del Partido Colorado.

 

En primer lugar, quiero darles las gracias al Supremo Hacedor, nuestro Dios Padre todo poderoso que siempre me ha iluminado para ser una persona de bien y de fe.

                Es un momento muy especial para mí, pues considero un honor ser militante de este glorioso partido y el haber podido trabajar en aras de su engrandecimiento, me siento altivo y entusiasmado por tener la oportunidad de encabezar la lista 2B de Honor Colorado en este momento, pero estoy muy consciente de lo complejo de la tarea que tenemos por delante. Quiero pedirles su ayuda a todos sin ninguno sobra, y también a los que han dejado de participar activamente, necesitamos su aporte. Y especialmente, a esos ciudadanos que esperan ver en nosotros un referente que los que los escuche, los represente y los atienda.

Desde que cumplí los 18 años, me enrole para tan noble tarea que es el servicio a los demás, desde el campo de la política, realice con gusto todos los roles que me han asignado, desde el pegar afiches, levantar pasacalles propagandísticos, ser miembro de mesa, veedor, apoderado, hasta encargado de los trabajos de laboratorio, que se denomina a la tarea de presentar informes de todo tipo, provenientes del tratamiento del padrón electoral partidario, como las nacionales.

                Por todas estas experiencias doy las gracias a todos los que me han permitido ser de alguna manera protagonista de tan digna tarea políticas, viviendo intensamente cada espacio tiempo, de nuestras construcciones sociales locales, de nuestros barrios, que ponen de relieve su importancia, por accionar por la fuerza de la verdad.

Doy gracias por ser parte de un renglón  de la historia de nuestra nucleación política partidaria colorada, nucleación que ha encarnado muchas de las transformaciones de nuestra historia, de la defensa de nuestra soberanía como nación, preconizando a la persona humana como valor sustantivo, manifestada en la forma republicana, democrática, participativa y representativa del gobierno, que son signos visibles de nuestra identidad  Con muchas satisfacciones, debo reconocer que he conquistado muchos y muy buenos amigos y por supuesto el orgullo de haber hecho algo bueno por el partido y la gente.

En este momento de mi vida nuevamente el partido me llama para sustentar ese camino recorrido, para lo cual estoy firme y presto, sin titubeo, porque tengo el honor de contar con un equipo humano y político caracterizado por su entrega a la educación, de ser actores del dinamismo que implica, las situaciones cambiantes y constante de nuestra cotidianeidad, en la familia, en nuestra comunidad y en todas las esferas de la vida que les toca accionar.

Contamos con proyectos, que consisten en la aplicación de conocimientos, herramientas y técnicas para encontrar respuestas adecuadas al planteamiento de necesidades perentorias, que queremos presentar a la gente de la comunidad y principalmente a los jóvenes de nuestros queridos barrios; Republicano y Santa Ana.

Estoy más que emocionado por el apoyo que, seguro estoy me brindarán, no solo en el día de la votación, momento crucial para ejercer nuestro derecho y soberanía de elegir, sino en todo momento en que el deber llama.

Convencido estoy del compromiso asumido porque daré todo de mí, y sacaré a relucir la mejor versión de mí, estoy muy feliz con este desafío y espero seguir siéndolo en el futuro.

Seguro estoy que, la política es una tarea augusta, y por amarga que parezca a veces, es la mejor oportunidad que se nos brinda para ser útiles a los demás, hacer política es en ocasiones desabrida e injusta, pero sabemos nosotros que, es entusiasta y audaz, también incluye ilusión y compañerismo, pasión por el servicio y el bienestar de la gente.

Con todo esto no quisiéramos prometer cosas que no se puedan cumplir, para no aumentar la creciente desconfiabilidad en la democracia, en las instituciones y en las personas, pues la confianza genera cohesión social y ésta, oportunidad permanente.

Claro está que, los que no definen como personas son nuestras acciones, y hacer equivale a resultados futuros y a resultados claros y contundentes, las promesas son acciones que deben convertirse en logros, en resultados por evidencias, es decir que existan pruebas sobre la eficacia, efectividad, en donde la eficacia real tiene que ser medida,  contra lo que se podría esperar, en base a evidencias y todo esto  en plazos razonables, para dar forma a la mejor práctica y de esta manera ir recuperando  la credibilidad política, y estar inclinado hacia  la democracia, responsabilidad individual y grupal.

Queremos fijar nuestro rumbo, para que: “El norte de nuestras acciones sea la persona humana”, como aquella expresión tan significativa expresada en el preámbulo de la Declaración de los principios de nuestro partido, que reconoce a “la persona humana como valor sustantivo” fundamentada en las palabras de un gran pensador allá por los años 470 a.C  Aristóteles, diciendo que, “la política es el arte de hacer lo imposible” es decir de aquellos que al pueblo es imposible de alcanzar, tornarlo realidad, de visualizarla.

La política debe defender los principios, sobre los intereses, eso es nobleza

Las campañas políticas no existen sin ideas y estas hay que transmitirlas, con los diferentes medios de comunicación posible, las personas no solo somos votantes sino tomadores de decisiones, cruciales para la vida.

No hay dudas de que vos, yo y nosotros decidiremos el futuro de nuestros barrios, y que debemos convencernos que, definiremos la gestión política que se viene, solo si tomamos la decisión, porque el poder lo tenemos todos y cada uno de nosotros, el cambio, la transformación está en nuestras manos, tomemos conciencia de eso ahora, para concretarlo el 18 de diciembre próximo.  

Para eso debemos saber qué, tipos de personas tenemos a nuestro alrededor, que nos ayuden a convertir los sueños en planes bien definidos, con actividades inteligentes y constantes, para no solo ofrecer burbujas, hay que recuperar, los créditos políticos y el compromiso ético y estar consiente que, mantener las ideas son justas por el derecho y bienestar de todos.

Es verdad que a la política no le faltan desdicha, pero hay que reconocer que tampoco carece de grandezas, y estas son las que nos importan, y que, con todas las barreras que nos impone la condición de ser humano imperfecto, debemos quedarnos con lo que, realmente vale la pena, ser responsables en el ejercicio de nuestros cargos, y que estemos preparados, siempre para responder con acierto cuando se nos reclame.

Por ultimo queridos amigos, vecinos y correligionarios; quiero darles las gracias porque me dejan hacer política, que es un riguroso examen de responsabilidad. Se trata de elegir, no lo que te interesa, ni lo que te antoja, ni lo que te aconsejan, si no de elegir lo que se debe hacer, aunque no resulte cómodo, ni aplaudido y mucho menos mediata, sino hay que, proceder con mesura, pasión y responsabilidad.

Conozco nuestro barrio, no por lo que me cuentan, sino porque soy de aquí, estoy aquí, y nunca le he visto a vuelo de pájaro, es decir desde arriba, sino caminando y compartiendo con la gente.

 

Profesor Alfredo Cantero